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¿Tienes la sensación de que por mucho que cuidas el cabello no crece? ¿Has probado numerosos tratamientos contra la caída y ninguno te ha resultado efectivo? ¿Tu pelo se siente seco y apagado?
¿Buscas remedios para hacer crecer tu pelo? En este post vamos a ver qué usos podemos dar a los aceites naturales y esenciales para cuidar la melena y propiciar su crecimiento. Siendo constante y con el tratamiento correcto en función de las características y necesidades de tu cabello, puedes hacer que este crezca sano, fuerte y brillante.
Quiero compartir contigo mi evolución, desde que hice el gran corte hasta hace unos días. El pelo me ha crecido fuerte y vigoroso. Lleno de brillo y cada vez es más abundante. Siguiendo estos sencillos pasos y con los aceites adecuados he conseguido tener el cabello como quiero.
Seguir una rutina capilar que incluya aceites es esencial
Para todo tipo de pelo es altamente recomendado que no falten los aceites en el régimen capilar. ¿Tienes el pelo graso? Tal vez eso haya hecho que los evites. Esto es fruto de la concepción errónea de que unas gotas de aceite en un tratamiento pueden hacer que generes más sebo. Pero esto no está directamente relacionado si eres constante y aplicas los correctos en las cantidades y los momentos idóneos.
Hay algunos aceites que son más viscosos y dejan sensación más grasienta, y otros que son más livianos y pueden ser absorbidos. Hay muchas opciones. Podemos mezclar aceites con nuestros productos favoritos, como cremas de peinar, leave-in conditioners, acondicionadores o champús. También podemos mezclar aceites puros con otros para que no resulten tan fuertes.
El pelo está vivo
Sí y no. La parte viva se encuentra en la raíz. De ahí hacia las puntas el pelo no tiene vida. Pero no por eso no significa que no debamos cuidarlo. Cuantas más trabajemos para conservar estas hebras, con cuidados precisos mantenidos en el tiempo, más durarán con nosotros y más largas y vigorosas serán.
Los cabellos rizados, tienden a ser más secos. Están más expuestos y no tan protegidos de manera natural que los pelos lisos. Esto depende del sebo natural que genera el folículo piloso cuya misión es humectar el pelo. ¿Qué ocurre con el pelo liso? Que tiende a ser más graso, pero simplemente porque la grasa natural que genera cae recorriendo toda la hebra capilar. De esta manera va a ser un pelo más humectado naturalmente que el pelo rizado que por su estructura en espiral, el sebo natural no se reparte por él tendiendo a quedarse únicamente en la raíz. Por eso es más seco y está más expuesto naturalmente a los agentes externos que lo debilitan y lo destruyen.
Es muy importante hidratar en cabello y trabajar para mantener esa hidratación más tiempo. Aquí es donde recurrimos a los aceites. Si tu pelo se cae, se quiebra y está opaco, te está diciendo que es hora de hacer algo y tal vez no sea tarde para recuperarlo.
Entonces sabes que tienes una misión y es hacer que el pelo esté nutrido para que crezca sano y fuerte.
Funciones de los aceites en el cabello
Esta técnica se basa en cuidar y evitar la deshidratación del cabello que ya tiene un tiempo de haber crecido al mismo tiempo que en propiciar un crecimiento sano desde la raíz. Es decir, vamos a buscar dos cosas:
- Sellar las hebras cuando han recibido hidratación para tratar de evitar que esa hidratación salga de la fibra capilar y permanezca en ella el máximo tiempo posible.
- Estimular el riego sanguíneo del cuero cabelludo para propiciar que lleguen a los folículos pilosos oxígeno y nutrientes.
Tipos de aceites que vamos a utilizar
Aceites Vegetales
Aceites vegetales: para tratar el cuero cabelludo, los folículos pilosos y las hebras, desde las raíces hasta las puntas.
Protegen el pelo de la acción de los agentes externos que pueden resultar dañinos, como el frio, el viento, el sol, la fricción que puede provocar el cepillo, las sábanas, la ropa… dan brillo y previenen las puntas abiertas. Su función más importante es retener la hidratación del cabello. Podemos encontrar dos tipos:
- aceites sellantes: recubren el pelo protegiéndolo. Aceite de jojoba, linaza, semilla de uva y aceite de almendra. Aquí también se incluyen las mantecas, con textura espesa y muchas veces sólida a temperatura ambiente. Son recomendadas para pelos rizados y afros ya que resultan muy pesadas para el pelo. Manteca de karité, manteca de mango, manteca de murumuru.
- aceites humectantes: pueden ser absorbidos por las hebras. Tienen acción sellante al mismo tiempo. Aceite de aguacate, oliva y coco.
Aceites Esenciales
Aceites esenciales: para tratar el cuero cabelludo y los folículos pilosos. Se extraen de plantas y frutos con propiedades beneficiosas. Le confieren vitaminas y minerales a la piel del cuero cabelludo y los folículos que los nutren y ayudan a generar cabello sano, fuerte y brillante. Pueden añadirse a otros aceites que hagan de base o a otros productos para enriquecerlos. Aceite de lavanda, aceite de árbol de té, romero, limoncillo, menta o salvia.
Evitemos los aceites minerales
En el comercio vamos a encontrar muchos aceites y muchos de ellos son ingredientes que contienen productos acondicionadores del cabello. En la medida de lo posible cuando hagamos tratamientos con aceites, vamos a utilizar aceites naturales y evitar los aceites minerales ¿Cuál es la diferencia? ¡Sigue leyendo amante del pelo natural!
Los aceites naturales tienen origen orgánico y los minerales provienen del petróleo. Estos últimos son componentes de muchas cremas de peinar y otros productos de belleza, pero en este caso para obtener buenos resultados de crecimiento no son recomendables, ya que, sí pueden retener la hidratación del pelo, pero no nutren ni son absorbidos.
Los aceites NO hidratan
“Hidrata tu pelo con aceite…”, esto es uno de los errores más comunes que llevamos leyendo y escuchando una y otra vez. El aceite no hidrata el pelo. Por más que eches tu pelo no va a estar más hidratado. Pero bien usado el aceite puede ser el colofón de una buena acción hidratante. Sellará la hidratación previa que haya recibido tu cabello, haciendo que perdure por más tiempo.
Los aceites vegetales son una parte importantísima de un régimen capilar equilibrado. Igual que sabes que la alimentación equilibrada es clave en este aspecto, tu pelo también debe ser alimentado y cuidado para que luzca impecable y todo lo largo que quiera.
Márca tu propio objetivo
Disfruta del momento y determina el largo del cabello que quieres conseguir en tu propio pelo natural. Puedes inspirarte en referentes amantes del pelo natural, con cabellos similares. Una vez marcada la meta solo es ser constante e invertir tiempo y cuidados. Tu pelo te lo va a agradecer con el paso del tiempo y vas a ver todos los beneficios. Merece la pena.
Chequea las recetas que vamos subiendo, cuéntanos las que haces tú para favorecer el crecimiento. ¿Combinas aceites? ¿Sigues un régimen de cuidado del cabello que incluye tratamientos con humectantes? ¿Qué otros tratamientos de crecimiento has probado? ¿Cómo de larga quieres que sea tu melena? Coméntamelo y si tienes alguna duda estaré aquí, ¡nos vemos pronto!
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Sobre el autor: Lorena Eyama Hernandez
